Concienciación sobre la realidad del suicidio
Concienciación y prevención del suicidio en las FCSE
(artículo de @kokecabrera)
¿Cuál es el motivo por el cual una persona decide suicidarse?
No se puede hablar de un único motivo, sino de un conjunto de posibles causas o circunstancias que concurren en el tiempo y pueden contribuir a incrementar el riesgo de presentar la ideación de suicidio, que podría acabar en fracaso, en el mejor de los casos, tentativa de suicidio, o en el peor de los casos, con la consecución de la finalidad de quitarse la vida, en suicidio.
El suicidio no es un trastorno, ni una enfermedad, es un síntoma, un síntoma de que algo está afectando gravemente a la persona que tiene ese síntoma. La posibilidad de suicidarse no depende del valor o la valentía de la persona, todo lo contrario, está más relacionado con el estado anímico de la persona. Según el DSM-IV-TR, el suicidio es uno de los síntomas principales del trastorno depresivo mayor, aunque el suicidio sea una de las complicaciones más importantes de los trastornos del estado del ánimo.
En la mayoría de los casos el suicidio se considera como la solución a un problema intratable o a problemas vitales. Más frecuente en casos de episodios depresivos mayores, y en determinadas profesiones.
El riesgo de suicidio se incrementa cuando se presentan varios factores que de forma individual contribuyen por separado a incrementar la ideación de suicidio, la tentativa o, desafortunadamente, el suicidio.
Los factores son múltiples, todos deben ser analizados y abordados por profesionales, en un equipo pluridisciplinar, en la prevención y tratamiento de pacientes con ideación o tentativa de suicidio, porque mediante el análisis de estos factores se podrá establecer la estrategia de terapias indivualizadas y especializadas encaminadas a estimular las ganas de vivir, a mejorar las relaciones personales, a tener un proyecto de fururo y, mejorar la integración social, entre otras.
En las FFCCSE, entre los factores de riesgo que pueden incremetar la ideación/tentativa/suicidio, se encuentran factores derivados de la organización del trabajo (ver imagen siguiente):
Algunas de las causas principales: como en cualquier otro caso, no hay una causa concreta. Como dice la Dra Mercedes Navío, psiquiatra especialista en suicidios, "no se puede hablar nunca de una causa concreta. El suicidio es un problema multifactorial, en el que influyen muchas variables". Pero en lo concerniente a las fuerzas de seguridad, hay una serie de patrones coincidentes.
Desde la Guardia Civil y la Policía Nacional apuntan los mismos factores comunes.
1) La misma naturaleza del trabajo, la presión y el estrés inherentes a la profesión: "El agente está expuesto cada día a asesinatos, robos, peleas, agresiones. Es muy difícil desconectar de todo eso. Te llevas el problema contigo", explican desde la Asociación Sindical Policial (ASP). Señalan que "durante la jornada laboral puedes haber visto cosas horribles que te han provocado un trauma o te agravan una depresión. Eso afecta a las relaciones con los tuyos cuando vuelves a casa".
2) Este es el segundo de los factores, la dificultad para conciliar la vida familiar. Los cambios de turno constantes, las jornadas nocturnas, las guardias de fin de semana, todo ello dificulta la convivencia con la pareja y/o los hijos. "La familia también quiere verte y hay semanas que apenas coincides. Los ves cuando vuelves de patrullar y ellos se van al colegio o a trabajar. Es duro para todos, porque este desequilibrio, a menudo genera tensiones familiares", explican desde ASC.
3) El tercer factor es el geográfico, dejar a tu familia y tu casa. En todo esto hay un dato extraño pero relevante: las policías autonómicas y las policías municipales no tienen índices de suicidios tan altos como en la Guardia Civil o la Policía Nacional.
¿A qué es debido?
El policía municipal tiene su ciudad como ámbito de actuación. El autonómico un poco más de territorio. Pero el policía nacional que quiera promocionar su carrera está sujeto a cambios constantes de residencia. Un ascenso suele conllevar un cambio de destino. Y la movilidad por toda España no es fácil de llevar, "O te marchas tú solo a un lugar nuevo que no conoces, o tienes que obligar a tu familia a irse contigo. No siempre se adaptan a un nuevo destino, un nuevo trabajo o un nuevo colegio. Si se van contigo les estás obligando a que renuncien a parte de su vida. Si se quedan, tienes que irte solo", cuentan desde el sindicato.
Muchas veces, para evitar estos dilemas, el agente opta por no promocionar su carrera, no progresar. "Prefieres estancarte profesionalmente antes que perjudicar a tu familia". Y esto hace que el agente pierda autoestima y se infravalore profesional y, personalmente.
Para un Guardia Civil, además, el problema se agrava por el particular concepto de hogar en el que tienen que convivir. "Cuando te toca vivir en una Casa Cuartel es imposible desconectar". Nunca te acabas de marchar del trabajo. Vives en él". El problema de las condiciones de vida de algunas casas cuartel ya está siendo denunciado desde dentro del cuerpo.
Cuando se evalúa el comportamiento suicida, se deben tener en cuenta algunos factores tales como la urgencia de los pensamientos suicidas actuales, el grado en el que la persona formula y lleva a cabo planes concretos definidos, la disponibilidad de medios para llevar a cabo el suicidio, la letalidad del método, los antecedentes de ideación o de tentativa de suicidio.
Desde
1999, la OMS emite un programa de prevención del suicidio: el programa
SUPRE (SUicide PREvention). De él, edita diferentes publicaciones que
conforman una buena base de decumentación sobre la prevención, la
intervención y postintervención en los casos de suidicio. Desde la web de la
OMS ( SUPRE (OMS) ) se pueden descargar estos documentos.
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